INGREDIENTES:               6-8 flanes

  

PARA LOS FLANES:

  • 1 litro de leche
  • 8-10 cucharadas de azúcar
  • 2 sobres de flanín el niño o potax

   

PARA EL CARAMELO:

  • 25 gr. de azúcar
  • 1 cucharada de agua
  • unas gotas de limón


    

PREPARACION:


LOS FLANES

   Apartamos una taza y media de el litro de leche y el resto lo ponemos a calentar con ocho o diez cucharadas de azúcar. Preparamos los moldes para los flanes y cubrimos su fondo con una ligera película de caramelo. En un bol mezclamos con la ayuda de unas varillas la leche con los dos sobres de flanín. Iremos añadiendo el contenido de los sobres a la leche poco a poco y moviendo con las varillas para que no se hagan grumos. Cuando la leche comience a hervir le añadimos esta mezcla y la volvemos a llevar a ebullición sin dejar de remover para evitar los indeseables grumos. Dejamos que hierva un minuto, apartamos y rellenamos los moldes. Dejaremos enfriar nuestros flanes a temperatura ambiente. Cuando estén fríos los conservaremos en la nevera.

  

EL CARAMELO


  1. Por cada 25 gramos de azúcar hay que echar 1 cucharada de agua fría. Para que el caramelo quede más líquido y pueda extenderse mejor, un buen truco es agregar un chorrito de zumo de limón al agua.
  2. Utilizar una cazuela baja (o una sartén antiadherente) con el azúcar y el agua y hay que llevarla a ebullición lentamente. Pasará de un espeso "jarabe" a ir adquiriendo una tonalidad oscura.
  3. En el momento que tengamos el caramelo oscuro debemos mover la cazuela -sin utilizar espátula- suavemente para esparcirlo por aquellas partes donde el azúcar no ha desecho todavía.
  4. Cuando el caramelo adquiera el color deseado (nunca negro, rubio- dorado - oscuro, de lo contrario será demasiado amargo) , quitarlo y utilizarlo inmediatamente, antes de que se endurezca.
  5. Si se endurece, un truco para recuperarlo es agregar una cucharada de agua y volver a llevar la mezcla a ebullición suave