Humphrey DeForest Bogart (25 de diciembre de1899 - 14 de enero de 1957) fue, es y seguramente será, el más afamado de todos los actores, una mítica leyenda del Hollywood dorado. El american Film Institute ha catalogado a Bogart como la mayor estrella del cine estadounidense.


     

EL MITO



El ajedrez, una de las cuatro
pasiones de Bogart.

     Cuatro pasiones alimentaban la vida de Humphrey Bogart: Betty, (así llamaba él a Lauren Bacall, su mujer), el Santana (su velero), su trabajo como actor y el ajedrez. Probablemente su idea de la felicidad consistiría en navegar en barco el fin de semana, con Betty a su lado, después de una semana de trabajo y unas cuantas partida de ajedrez con adversarios de valía.

     Pero la felicidad no se consigue fácilmente, tardó bastante en alcanzar el estrellato. Por el camino tuvo que emborracharse en bares clandestinos debido a la prohibición -la ley seca-, aceptar cualquier trabajo -como jugar al ajedrez en el escaparate de unos grandes almacenes-, hacer de meritorio, de figurante, de secundario encasillado como gángster...

     Su suerte comenzó a cambiar con El bosque petrificado, una obra de teatro donde interpretó a su primer gángster -Duke Mantee- junto a Leslie Howard. Intervino también el la homónima versión cinematográfica producida por la Warner Brothers. Durante cinco años interpretó para este estudio, con ligeras variaciones, el mismo personaje, siempre a las ordenes de otro gángster más importante: Robinson, Cagney, Raft...

Bogart y Lauren Bacall en el Santana.

     Su carrera volvió a tomar impulso con El último refugio de Raoul Walsh merced a un personaje más profundo y de mayor lucimiento interpretativo. El guionista era John Huston, desde entonces
gran amigo de Bogart, y que sería el que impulsaría definitivamente la carrera del actor ofreciéndole el papel de Sam Spade en El halcón maltés. 

Pero la película que le ascendería al estrellato sería Casablanca, una película sin excesivas pretensiones, sin guión definido y con una joven actriz sueca que ignoraba a que personaje amaba realmente. 

Michael Curtiz, el director, ya nos presenta a Bogart, en su primera aparición en Casablanca, como una estrella: se ve su mano garabateando O.K. sobre un pagare, la mano toma un cigarrillo, que reposa encendido en el cenicero, la cámara bascula y se le ve la cara. Ya nunca dejaría de ser una estrella. 

Dos años después, Howard Hawks, lo uniría, en Tener o no tener, a una chica pelirroja de 19 años. Si me necesitas silba -dijo ella. Y Bogart silbó. Ella se llamaba Lauren Bacall. Ya no volverían a separarse hasta que la muerte, prematuramente, nos arrebató a Bogart. Pero la estrella no se apagó: se convirtió en un mito cuando las generaciones posteriores le descubrieron en películas antiguas.


    

BIOGRAFIA


NACIMIENTO



Humphrey Bogart.
     La leyenda de Bogart se inicia con su propio nacimiento. Según algunos biógrafos nació el 23 de enero de 1899, según otros, nació el 25 de diciembre de ese mismo año. Cierto es, que tanto Lauren Bacall como su hijo Stephen reconocen que celebraban su cumpleaños en Navidad. Verdadera o no, la costumbre  se impuso, y haber nacido seis días antes de terminar el siglo, permitía a Bogart presumir de ser una persona del siglo pasado. Algunos sostienen, que el haber nacido el día de Navidad, fue una ficción creada por la Warner Bros. para idealizar su pasado, y que Bogart nació realmente el 23 de enero de 1899, fecha que aparece en numerosas referencias. No obstante, esta teoría se considera sin fundamento porque, aunque no se ha encontrado su partida de nacimiento, este fue publicado en un periódico de Nueva York, a principios de enero de 1900, hecho este, que apoya con fuerza,  la teoría de la natalidad en diciembre. Otro importante apoyo para esta última teoría es el hecho de que Bogart fue censado en 1900.

   

INFANCIA

Belmont De Forets Bogart,
el padre de Humphrey.

     Humphrey Bogart fue el primer hijo de una acomodada familia de Nueva York. Su padre, Belmond DeForest Bogart (1867-1934), era un cirujano cardiopulmonar con una secreta afición hacia los opiáceos. Su madre, Maud Humphrey (1868-1940), una conocida ilustradora de revistas, formada artísticamente en Nueva York y Francia, siendo alumna, entre otros, de James McNeill Whistler, que más tarde sería el director artístico de la revista de moda The Delineator. Belmont era presbiteriano y Maud pertenecía a la iglesia

Humphrey Bogart bebe con su madre, Maud
episcopal, siendo además, dicho sea de paso, militante sufragista. El matrimonio, que tuvo dos hijas más -Frances, llamada Pat, y Catherine, llamada Kay-, educó al pequeño Humphrey en la creencia de la madre, Maud, que acostumbraba a utilizar a su hijo como modelo en comedias infantiles y todo tipo de anuncios de productos para niños.

Maud utilizaba al pequeño Humprey Bogart
como modelo para sus anuncios

Los hermanos Bogart no tuvieron una infancia feliz debido a las constantes peleas y gritos de sus padres que además solían dejarlos frecuentemente en compañía de los criados.

    


     Bogart comentaba sobre su infancia:

"Crecí sin sentimentalismos, de una forma muy llana. Un beso en nuestra familia era un acontecimiento. Mis padres no nos mimaban a mis hermanas y a mi. Tenían demasiadas cosas que hacer"

     

Humphrey Bogart adolescente, con el pelo engominado
y la raya en el centro.

  

     Los Bogart vivían en un apartamento del elegante barrio Upper West Side y poseían una casa de campo, con 55 hetáreas de terreno, en el norte del estado de Nueva York, en Conandaigua Lake.
Humphrey era un estudiante mediocre e indiferente, con escaso interés por las actividades escolares. Cursó sus estudios en las escuelas privadas de Delancey, hasta quinto grado, y después en Trinity School. Para la enseñanza preparatoria fue admitido, debido a sus vínculos familiares, en la prestigiosa Phillips Academy de donde termino siendo expulsado sin que estén muy claros los motivos, pues circulan varias versiones. El hecho lo aprovecho Bogart para esquivar el futuro que habían trazado para él sus padres, que esperaban que su hijo estudiase en la universidad de Yale. Bogart, en cambio, se alistó en la marina. Había comenzado la Primera Guerra Mundial.

    

     


Humphrey Bogart
en 1917, durante la
Primera Guerra Mundial.

            

       

     En Conandaigua Lake el doctor Bogart enseño a su hijo a jugar al ajedrez y el arte de navegar en velero. Dos de las grandes pasiones de Bogart.




  
     
     "Si bien Bogey tuvo una infancia estable en el plano material, no creo que fuese satisfactoria en el aspecto emocional". (Stephen H Bogart, hijo de Humphrey).

    


    

          Paseo de la fama:

          La estrella de Bogart esta ubicada en 6322 de Hollywood Boulevard.

    

    



LA ARMADA

     Tras la expulsión de la Phillips Academy, con escasas perspectivas laborales, y enamorado, como lo estuvo durante toda su vida, de la navegación, optó por enrolarse en la marina de los Estados Unidos. Durante su estancia en la armada estuvo destinado en el USS Leviathan, repatriando soldados que volvían a casa tras el armisticio.

   

     "A los dieciocho años, la guerra tenía atractivo: ¡París! ¡Las francesas!... ¡Máldita calentura!". (Humprey Bogart).


    


La cicatriz

  
La dicción de Humphrey Bogart era
imperfecta. Muchos lo achacan a una
cicatriz en el labio superior.

    


Circulan diferentes versiones sobre el origen de la cicatriz que "adornaba" el labio superior de Bogart. Son numerosos los que vinculan dicha marca a su estancia en la armada. Otro de los debates abiertos sobre esta cicatriz se ciñe a su culpabilidad o inocencia sobre la peculiar manera de hablar de Bogart, su característico ceceo. En una de las versiones sobre la discutida cicatriz, se
cuenta que durante un bombardeo a su barco, un trozo de metralla se alojó en el labio superior de Bogart. Pero hay quien afirma que Bogart no se hizo a la mar antes de la firma del armisticio. Sin embargo, según Darwin Porter (Bogart, los primeros años) la marca se debe a su padre, Belmont, durante una temible discusión. Por otra parte, David Niven preguntó un día a Bogart por la famosa cicatriz. "Me cosieron mal", respondió Bogart, y añadió, que el origen de la cicatriz fue un accidente en la infancia. Según Niven, las historias que circulaban, sobre la obtención de la cicatriz en tiempos de guerra, fueron una invención de los estudios para inyectar glamour a su estrella.

     No se menciona, sin embargo,  la cicatriz en el reconocimiento físico realizado post-servicio por la armada, aunque si se detallan otras más pequeñas. 
     La actriz Louise Brooks, que coincidió con Bogart en 1924, afirmaba que cuando lo conoció había tejido con algunas cicatrices. Y podría haber sido reparado antes del desembarco de Bogart en el Hollywood en 1930.
     Y, por último, la versión más extendida que también sitúa la natalidad de la polémica cicatriz en la armada. Su hijo Stephen, en la página web oficial de Humphrey Bogart, lo cuenta así:

     
     "En mayo de 1918, después de un breve periodo en la academia de Andover, Massachusetts, Bogart se alistó en la marina. Fue asignado al Leviathan. Ejerciendo sus funciones se produjo la famosa cicatriz que marco la esquina derecha de su labio superior. A pesar de los numerosos rumores la lesión no fue consecuencia de la metralla. La siguiente historia es probablemente la más cercana a la verdad de lo que realmente sucedió. Un preso de la marina, a quien escoltaba Bogart, le pidió un cigarrillo. Mientras se rebuscaba el cigarrillo, el preso le rompió la boca con las esposas y huyó. Bogart lo persiguió y detuvo, y rechazó el tratamiento hasta que el preso no estuviese encerrado en una celda".

     

    




Louise Brooks conoció a
Bogart en 1924

Louise Books

Louise Brooks afirmaba que cuando conoció a Bogart tenía algunas cicatrices en el labio superior.



Aunque también declaró en otra ocasión:



"Un chico esbelto, de modales encantadores, que hablaba poco para tratarse de un actor. El encanto de su rostro resultaba extraordinario gracias a su boca excepcional, muy llena, rosada y de perfecto modelado". 

(Louise Brooks).

   
    

LA FAMILIA

     Tras licenciarse regresó a casa; encontró a su padre con la salud deteriorada, puede que, en parte, debido a su adicción a la morfina. Seguía ejerciendo la medicina, aunque de forma vacilante, y había perdido gran parte del dinero familiar en unas malas inversiones en el sector maderero.

A Devil with Women. Una película rodada en Nueva York
mientras hacía teatro, en 1930.
Durante su estancia en la marina, lejos de la influencia familiar, Bogart había adquirido una ideología independiente y, ocasionalmente, se rebelaba contra los valores preestablecidos en su familia. Por aquella época era un liberal que detestaba farsantes y snobs y, con alguna frecuencia, desafiaba los convencionalismos y a la autoridad. Mantenía, sin embargo, los buenos modales, la modestia y la puntualidad. Con un futuro incierto, sin demasiadas expectativas ni esperanzas, Bogart realizó multitud de trabajos, como vendedor de bonos o cargador. Bogart ocupaba su tiempo libre asistiendo a bares clandestinos de la época, de los que se hizo asiduo y se convirtió en bebedor empedernido. Se reencontro con Billy Brady, amigo de la infancia, y juntos recorrían los teatros de Times Square. Billy era hijo de un empresario teatral, William A. Brady, que empezaba a interesarse por el cine.

   

Bogart en un fotograma de una película de 1930.

     La relación con sus padres se normalizo un poco al hacerse Bogart más adulto y comprender los sentimientos que tenían hacía él.

   
Sus padres se separaron. Belmond murió endeudado en 1934. Bogart pudo llegar a tiempo para decirle que le amaba; recibió como herencia una deuda de 10000 dólares y un anillo con dos rubíes y un diamante que siempre llevaba puesto, incluso en alguna de sus películas. 

        

     El destino de sus hermanas fue aún más trágico. Pat, la mayor, casada con su amigo Stuart Rose, tuvo un parto desgraciado que le hizo perder la razón. Durante toda su vida Pat fue una enferma mental al cuidado de su hermano. Kay, la más joven, una chica hermosa y alegre, sucumbió a su tiempo. Moriría a los 35 años completamente destrozada por el alcoholismo. Maud, su madre, al morir Kay, se traslado con Pat a Los Angeles, al cuidado de su hijo. Bogart la veía muy a menudo y fue, en esa época, cuando aprendió a comprenderla e incluso a admirarla. No en vano Maud había sido una mujer famosa gracias a su propio esfuerzo y, además, había sido siempre una mujer cuya actitud y forma de pensar se avanzaba claramente a su tiempo. Murió en 1940 sin tener tiempo de ver a su hijo convertido en una estrella, pero satisfecha con los resultados de su trabajo.

         

     

TEATRO y coqueteos con el cine

      
     "Me bastó mirar una vez el hueco donde estaría el público por la noche para olvidarme de todo". (Humphrey Bogart).

    

Con Leslie Howard hizo Stand In, despues de interpretar
El bosque petrificado, tanto en teatro como en cine.

    


     La amistad con los hermanos Brady, Billy y Alice, provocó que el padre de ambos, William A. Brady (propietario de la World Film Corporation), a petición de su hija Alice (actriz de cine y teatro), diese una oportunidad a Bogartempleándolo como chico de los recados de la compañía. Después ocuparía varios puestos (escritor de guiones, dirección, producción, director de escena...) pero no destacó en nada. Meses más tarde, en 1921, Bogart se vio obligado a sustituir a un actor en una obra de Alice Brady. Este fue su debut como actor e interpretó a un mayordomo japones. El doctor Bogart, viendo actuar a su hijo, se inclinó hacia su compañero y le susurró: "Es bueno, ¿no?". Siguió apareciendo en obras posteriores, tenía 22 años y una planta elegante y deportiva, ideal para galán joven. Pero no era muy bueno, a juzgar por las críticas de la época, que no eran tan bondadosas como el doctor Bogart. Un crítico escribió de él: "Ese joven es lo que habitual y benévolamente se describa como inadecuado". 


Spencer Tracy y Bogart fueron grandes amigos.

     Bogart no se amilanó. Las críticas le animaban a esforzarse por ser mejor. Durante trece años no dejó de aparecer por los escenarios. Después del crack económico de 1929, las producciones teatrales se redujeron considerablemente y muchos dirigieron sus miradas hacía un Hollywood que comenzaba la aventura del cine sonoro. Bogart tuvo un papel en una película con Helen Hayes (The Dancing Town), pero nunca se ha encontrado una copia completa. También apareció junto a Joan Blondell y Ruth Etting en un cortometraje, Broadway's Like That (1930), que fue reedescubierta en 1963.

     Firmó un contrato por la Fox Film Corporation de 750 dólares a la semana. Por Hollywood estaba también Spencer Tracy, un actor de Broadway al que Bogart admiraba. Se convirtieron en grandes amigos y compañeros de juergas etílicas. Tracy fue el primero que le llamo Bogey (escrito de diversas formas, según fuentes. Bogart lo escribía Bogie). Solo hicieron una película juntos Up the River (1930) de John Ford. Después, Bogart, tuvo un pequeño papel en The Bad Sister con Bette Davis. Bogart iba y venía entre Hollywood y los escenarios de Nueva York desde 1930 hasta 1935, sufriendo largos periodos sin trabajo.

      


EL BOSQUE PETRIFICADO

      En Broadway, durante 1934, se representaba, en el teatro Masque, ahora John Golden Theatre, la obra Invitation to a Murder (Invitación a un asesinato) que contaba en su elenco con Humphrey Bogart. El productor Arthur Hopkins presenciaba la representación y le gustó la interpretación de Bogart. Pensó en él cuando Robert E. Sherwood estaba preparando su obra El bosque petrificado con el actor ingles Leslie Howard de protagonista. Hopkins veía a Bogart como el segundo personaje, el gángster Duke Mantee. La obra fue un absoluto éxito, con 197 representaciones en el Boadhurst Theatre de Nueva York. El 29 de junio de 1935 se representó la obra por última vez con el cartel de agotadas las localidades. Bogart no volvería a pisar un escenario.

   

Bogart como Duke Matee, el cruel secuestrador de El bosque
petrificado, dirigida por Archie Mayo.

    

   

     La Warner Bros. compro los derechos de pantalla para El bosque petrificado. La película sería dirigida por Archie Mayo y contaría con Leslie Howard y Bette Davis. Para el papel de Mantee se pensó en Edward G. Robinson que tenía contrato con la productora. Sin embargo, Leslie Howard convenció a Jack Warner para que contratara a Bogart, advirtiéndole que no participaría en la película si Bogart no interpretaba a Mantee. Bogart siempre estuvo agradecido a Howard y, años más tarde, llamaría a su única hija Leslie.



    

BOGART Y SUS MUJERES

Humphrey Bogart y Helen Menken.

Fue su primera esposa y una de sus
mejores amigas.

     Humphrey Bogart, según numerosos testimonios -biógrafos, amigos, Lauren Bacall...- no era el típico actor que se liaba con las actrices con las que trabajaba o con las múltiples aspirantes a estrellitas que pululaban por los estudios. Sabía mantenerse alejado de este tipo de comportamientos y de los problemas que inevitablemente acarrean.

     Pero, evidentemente, las mujeres le gustaban, y tuvo líos de faldas, baste decir que a dos de sus esposas las conoció estando aún casado con otra.

     Estuvo casado cuatro veces, las cuatro con actrices. La primera fue Helen Menken, a la que conoció en el Playhouse Theatre en 1922. Se casaron el 20 de mayo de 1926 en el Gramency Park Hotel de Nueva York. Los dos tenían 26 años. Ella era una actriz conocida e importante en Broadway y él un actor que empezaba. El matrimonio no salió bien y se divorciaron el 8 de noviembre de 1927.

   

Mary Philips, la segunda esposa de Bogart.

"Helen y yo nos peleabamos por las cosas más absurdas".

(Humphrey Bogart).



    

     Lo que si perduró de este fallido matrimonio fue la amistad entre ambos. Más tarde, cuando estaba casado con Mayo Methot, e incluso con Lauren Bacall, solía visitar a Helen en busca de consuelo o de un rato de charla.

     

    

     El 3 de abril de 1928 se casó con Mary Phillips, también actriz, como todas sus esposas. Ella tenía 25 años, él 28. Conoció a Mary cuando interpretaban la obra Nerves (nervios) que tuvo un breve paso por el Comedy Theatre en septiembre de 1924. Poseía un temperamento ardiente, un caracter fuerte, igual que Menken.


     "Mary es una mezcla de Nueva Inglaterra e Irlanda, y me proporciona, precisamente, el tipo de equilibrio que necesito. Estoy seguro que casarme con ella es lo más maravilloso que podría sucederme".

(Humphrey Bogart).     

En 1924, Bogart trabajó con Mary Phillips,
su segunda esposa, en una obra de teatro
en Broadway llamada Nerves. Les acompañaba
 Paul Kelly como tercer protagonista.




     Bogart intentó dos veces que se fuese con él a Hollywood, a principios de los 30, cuando fue por primera vez, y en 1936, cuando se instalo definitivamente después de rodar El bosque petrificado. En ambas ocasiones Mary rehusó. Ella era una actriz más importante que él y no estaba dispuesta a abandonar Nueva York donde tenía una brillante carrera teatral que ya estaba en marcha cuando

Bogart y Mary Phillips.
conoció a Bogart. Soportaron juntos los duros años de la depresión y la prohibición. Las penurias económicas y las borracheras de Bogart fueron sobrellevadas por Mary con buen humor.

    El matrimonio tenía un acuerdo: Cuando no estuviesen juntos, cada uno podría salir con otras personas. El resultado fue un divorcio en 1938 y una doble boda: Mary se casaba con uno de los más viejos y queridos amigos de Bogart, Kenneth McKenna y él se casaba con Mayo Methot.


    "Había estado casado en tres ocasiones, con Helen Menken, Mary Phillips y Mayo Methot. Las tres eran actrices, y ni ellas ni papa se habían planteado nunca procrear".

(Stephen H. Bogart).


    

Mayo Methot.

     Bogart y Mayo se conocieron en una fiesta en 1936. Los dos estaban casados pero empezaron a salir juntos. A Mayo, que era hija de un capitán de barco, le encantaba el mar, también sentía debilidad por la bebida. Dos aficiones comunes entre ellos. Se casaron el 21 de agosto de 1938 y desde el primer momento fue un matrimonio desastroso. Se pelearon y el novio paso la noche de bodas durmiendo solo en un hotel de Tijuana completamente borracho. Mayo era una mujer alegre y amable cuando estaba sobria pero, en estado de ebriedad, se transmutaba en una mujer paranoica que estaba convencida de que su marido la engañaba. El matrimonio sería una continua sucesión de peleas, gritos, golpes... Incluso llegó Mayo Methot a prender fuego a la casa, a apuñalar a Bogart con un cuchillo y a cortarse las venas en varias ocasiones.

    

Humphrey Bogart se prepara para ir al frente.

Su tercera
esposa, Mayo Methot observa atenta el reconocimiento.

    

    Sin embargo, todo acababa en reconciliación. La prensa los bautizó como "The Batting Bogarts", La batalla de los Bogarts. El guionista Julius Epstein solía decir que el matrimonio Bogart-Methot era una secuela de la guerra civil.

     Mayo abandonó su carrera y su única ocupación fue seguir a Bogart y hacerle una escena de celos por cada mujer que pasaba a su lado. Humphrey Bogart no podía más, y entonces sucedió que se cruzó en su camino una jovencita de ojos verdes, largas piernas y 19 años. Se divorciaron en 1944 y, a diferencia de sus otras mujeres, nunca más supo de ella. La noticia de su muerte le llegó mientras rodaba en el continente africano La reina de Africa.

    

Bogart y Mayo Methot tomando
una copa en casa.

Bogart y Mayo Methot con un grupo


de amigos durante una fiesta
en Hollywood.

Frases de Bogart durante la época de Mayo Methot:  



     
"Me gusta una mujer celosa".



     
"Yo no daría dos centavos por una dama sin genio".



     
"Nos llevamos tan bien porque no tenemos ilusiones sobre los demás".


     "Yo lo que quiero es una mujer que me espere en casa cuando vuelvo de trabajar".

(Humphrey Bogart).


    

     Tras la muerte de Mayo, en 1951, todas las semanas un ramo de flores aparecía sobre su tumba. Dejaron de aparecer en 1957, justo una semana después de la muerte de Bogart.

    

Otras mujeres

Bogart y Verita Thompson, su peluquera.

     Al margen de sus esposas, hubo algunas mujeres importantes en la vida de Bogart. Una de ellas fue Verita Thompson, una morenita pequeña y divertida que quiso ser actriz y acabó de peluquera personal de Bogart. Ella era la que cuidaba, preparaba y colocaba los peluquines que el actor tuvo
que usar buena parte de su vida. La conoció en 1942, en un plató, y parece que tuvieron una bonita aventura sin consecuencias. Sin embargo, Verita aseguro que había sido amante de Bogart hasta su muerte, mientras estuvo casado con Mayo y más tarde con Lauren Bacall. Si es verdad o mentira, solo ella lo sabe.

     Hubo otra mujer mucho más importante que Verita e incluso que alguna de sus esposas. Una mujer con la que Humphrey Bogart no tuvo ninguna relación sentimental ni sexual, pero que significo mucho para él a lo largo de su vida. Se trata de Mary Baker, amiga primero y representante después. Mary conoció a Mary Phillips, en su casa se casó con Mayo Methot y Lauren Bacall la adoraba. Con todas se llevo bien. Mary tenía la ,capacidad de consolar a Bogart, de comprender a Mary y de calmar a Mayo. Por ello se convirtió en una especie de centro de equilibrio, en el punto de referencia: todos recurrían a ella y ella siempre estaba dispuesta.

            

BOGART Y LOS GANGSTERS

"Raft y Bogart ofrecieron muy buenas interpretaciones como
camioneros, pero la bella e inteligente Ida Lupino se lanzó al
estrellato con aquel film"

(Raoul walsh, hablando de
La pasión ciega)

 

    El bosque petrificado se estrenó en 1936 y la actuación de Bogart fue calificada por la crítica como: "brillante", "convincente", "excelente". A pesar del éxito interpretativo, la Warner ofreció a Bogart un modesto contrato de 26 semanas y 550 dólares semanales y fue encasillado como gángster en películas de la serie B.

     Algo debía haber en el rostro o en en la voz de Humphrey para que se le identificara rápidamente con el malo de la película. En sus primeras cuarenta y cinco películas, Bogart fue ahorcado o electrocutado ocho veces, condenado a cadena perpetua nueve y acribillado a balazos una docena más.

Humphrey Bogart, Leslie Howard y Bette Davis
en una escena de El bosque petrificado.

    Los personajes de Bogart eran tipos endurecidos que encajaban mal en la sociedad, incluso antes de encontrarse con Duke Mantee, el personaje de El bosque petrificado, ya había sido gángster en cuatro de sus primerísimas películas. Pero cuando aceptó ser el cruel secuestrador de

Leslie Howard en El bosque petrificado, en el teatro y más tarde en el cine, firmó su sentencia de gángster.

     Durante cinco años sus personajes estarían siempre al margen de la ley y normalmente como oponente de Robinson, Cagney o Raft.
     La mayoría de estas producciones no llegaron a estrenarse en España, que se debatía en una guerra civil y no estaba la cosa para tiroteos en Chicago o Nueva York.

     Bogart estaba resignado a ser el malo que muere al final, pero en 1941 aparece John Huston en su vida y sus gángsters cambiaron de rumbo así como también su carrera.

Bogart y Robinson en Kid Galahad

de Michael Curtiz.

     El personaje que inició la transición fue Roy Earle de El último refugio, guión escrito por John Huston para el director Raoul Walsh. Desde luego que Roy Earle era un gángster y también moría al final, pero le permitió a Bogart demostrar su capacidad interpretativa ya que podía dotar de humanidad, incluso de ternura a un personaje intrinsecamente malo.

     A partir de entonces, Humphrey Bogart no volvería a ser el que muere al final. Incluso aunque siguiera haciendo de gángster como en La senda tenebrosa, junto a Lauren Bacall, o el Glenn Griffin de Horas desesperadas, diriguida por William Wyler, una de las últimas películas de Bogart. Sus personajes tienden a convertirse en aventureros, perdedores, solitarios peligrosos, pero ya, no son malvados.

    


     "Bogart sabe ser duro sin necesidad de pistola".

(Raimond Chandler).

   




 
   "Bogart ofreció a la cámara una nueva imagen filmica. Frente a Robinson, el gángster fanfarrón, y frente a Cagney, el gángster ocurrente. Bogart era el asesino de ojos obsesionados".
     (Eric Lax).



La senda tenebrosa (1947) de Delmer Daves.
     "Aprendí muy pronto que no se podía matar a Gable o Flynn. Pero cuando matabamos a Cagney y a Bogart, al público y a la taquilla le encantaba".
     (Raoul Walsh).


       

     


"En el transcurso de cuarenta películas, ha muerto electrocutado en silla electrica una docena de veces y le han caido un total de unos ochocientos años de carcel".
(François Truffaut).


     

   




HUMPHREY BOGART Y JOHN HUSTON

     Sus miradas se encontraron por primera vez en el Salón Verde, eufemístico nombre con el que se designaba a la cantina de los estudios Warner Bros. en 1938 ¿Puede haber lugar más adecuado para que se encuentren dos amantes de la bebida? Por esa época Huston era un aspirante a guionista y Bogart un actor condenado a morir en todas sus películas, una de las cuales, The Amazing Dr. Clitterhouse (más conocida entre ellos como doctor Clítoris), estaba escrita precisamente por Huston. Su relación por entonces era superficial y se limitaba a saludos con la cabeza y a sostenerse la mirada.

     

Si había dos personas en el mundo predestinadas a conocerse,
 eran, sin duda, John Huston y Humphrey Bogart. 

    

     Dos años después, Huston era ya un guionista importante en la casa. Había escrito el guión El último refugio y conspiraba en la sombra para que no le dieran el papel a George Raft, actor que detestaba. El resultado favoreció a Bogart y Huston se alegró. Durante el rodaje, Huston, que ya tenía en la cabeza ser director, acudía diariamente al plató para ver trabajar a Walsh y allí nació la amistad con Bogart. Por eso, cuando la Warner le ofreció la oportunidad de dirigir su primera película, la famosa El halcón maltés, volvió a conspirar para que no la interpretara ni Paul Muni ni George Raft, sino el que ya era uno de sus mejores amigos: Humphrey Bogart.

John Huston en sandalias y "bermudas".

     El halcón Maltés fue el comienzo de una carrera inolvidable como director de John Huston y relanzó, definitivamente, a Humphrey Bogart hacia el estrellato. Después harían juntos cinco películas más.Volvieron a reunirse en Across the Pacific, repitiendo también Mary Astor y Sidney Grrenstreet. Después Huston, seis años más joven que Bogart, se marchó a la guerra donde estuvo rodando propaganda bélica durante toda la contienda. Los dos volvieron a encontrarse en 1943 cuando Bogart y Mayo hacían una gira por los campamentos militares americanos en Europa. Huston estaba destinado en Francia.

     Al acabar la guerra, la negra época de la Caza de brujas, les unió en la lucha política cotra la escabechina que se abatió paranoicamente sobre Hollywood. Huston, con las ideas claras, estaba más seguro de su pensamiento. Bogart vaciló en algún momento. Huston no le perdonó nunca que se retractara de haber participado en la famosa marcha sobre Washington en defensa de los acusados por el Comité de Actividades Antiamericanas. Pero eso no impidió que su amistad se mantuviera como una granítica roca. La prueba fue El tesoro de Sierra Madre, donde Bogart aguantó, no sin protestar, todas las incomodidades de un rodaje en México, con calor, polvo y serpientes.

Lauren Bacall y Bogart en la Marcha sobre Washington.

     

     "Durante ese rodaje, Bogie y yo tuvimos nuestra única pelea. Bogie deseaba que su barco, el Santana, participara en una regata en Honolulú. Yo no estaba dispuesto a permitir que la regata de Bogie interfiriera en mi película".
(John Huston).

     

     

     Un año después, repetían juntos, esta vez con Lauren Bacall como la chica y Robinson como el malo en Cayo Largo, y en 1951, rodarían la obra maestra de su colaboración: La reina de Africa, una película mítica por la que Bogart consiguió el Oscar y encontró una nueva amiga, Katharine Hepburn. El rodaje de esta inolvidable historia de

Humphrey Bogart,

El tesoro de Sierra Madre.

amor entre el borrachín Charlie Allnut y la solterona de mediana edad Rose Sayer es, en si mismo, una aventura convertida en película por Clint Eastwood en Cazador blanco, corazón negro. Huston era feliz cazando y filmando, Hepburn era feliz paseando por la selva como si fuera Central Park, Bacall era feliz cocinando y Bogart era feliz emborrachándose continuamente para poder soportar los mosquitos, las enfermedades, el calor y los retrasos. Todos sobrevivieron y consiguieron un film que ocupa un lugar de honor en la historia del cine.

   

     "En realidad creo que nuca vi a Bogie borracho. Sus borracheras eran siempre medio fingidas, pero le encantaba montar el número".
(John Huston).


   

     Aún harían otra película juntos, se tituló La burla del diablo, se rodó en Napoles, y fue un auténtico desastre en su momento, aunque después se ha convertido en una película de culto para la crítica europea. Bogart nunca entendió bien de que iba la película, pero se divirtió haciéndola. Fue quizás su último rodaje entre amigos. La enfermedad ya le rondaba y sus siguientes trabajos no fueron especialmente felices.

   

Katharine Hepburn y Humprey Bogart
en la Reina de Africa.

     Huston hablaba siempre de hacer una nueva película juntos, una adaptación de El hombre que pudo reinar de Rudyard Kipling. A Bogart le entusiasmaba la idea, pero nunca llegó a hacerla. En la Navidad de 1956, Lauren llamó a Huston a Nueva York y le dijó que Bogie se moría. Le pidió que escribiera algo para el elogio funebre por si no estaba en Estados Unidos cuando llegara el momento. Huston volvió a Los Angeles para estar con él. El 14 de enero, Bogart moría. El funeral se celebró el 18 de ese mes. Huston habló de su amigo con un respeto y un cariño que venían de muy dentro: "No tenemos motivo para compadecerlo; si a nosotros mismos por haberlo perdido. Nadie podrá reemplazarlo". Esta fue la última línea del último guión que Huston escribió para uno de los actores que mejor había comprendido su cine y sus personajes: Bogart.




    

   

En primer plano Bogart, al fondo Hepburn.


"Cuando empezamos, a Bogie no le gustaba especialmente el papel de Charlie Allnut, pero poco a poco le hice entrar en el".

(John Huston).


 
   "No hay nada de malo en hacer de secundario en una película protagonizada por Walter Huston y dirigida por John Huston".
(Lauren Bacall a Humphrey Bogart refiriendose a El tesoro de Sierra Madre).



     "Bogie era un hombre de estatura media, no particularmente notable fuera de pantalla, pero algo sucedía cuando estaba interpretando el papel adecuado".
(John Huston).

Katharine Hepburn y Bogart, el borrachín y

la solterona de La Reina de Africa.

     "Bogie era curioso. Un actor generoso. No se andaba `por las ramas. Disfrutaba con su trabajo".
(Katharine Hepburn).



     "Los que no saben que Bogart era un gran comediante, pueden verlo aquí en un duelo de igual a igual con una reina del género, Katharine Hepburn".
(Fernando Trueba).



 
   "La burla del diablo se adelanto a su tiempo. Su humor delirante dejaba a los espectadores desconcertados y confusos".
(John Huston).


    

Ivor Barnard, junto a un envejecido Bogart en

La burla del diablo.



 
   "Se veía terrible, tan flaco, horrible. Y sin embargo era alegre y valiente".
(Truman Capote, co-guionista de La burla del diablo).



 
   "La primera película de Bogart que ví fue El halcón Máltes, tenía diez años y en seguida me identifiqué con Peter Lorre"
(Woody Allen).

   

      

John Huston y Lauren Bacall siguieron siendo
amigos tras la muerte de Bogart.







     "En todas las fuentes de Versalles hay un lucio que mantiene activas a las carpas. Bogie hallaba un placer poco común realizando una tarea similar en las fuentes de Hollywood".
(John Huston).

    

   

  



CASABLANCA

    El bosque petrificado abrió las puertas del cine a Bogart, aunque le encasillo como gángster, El último refugio demostró que podía interpretar algo más que a un simple matón, en El halcón Maltés ya fue detective y protagonista, pero sería Casablanca la película que le encumbraría definitivamente al estrellato y, con el transcurso del tiempo, en el mítico actor que actualmente es.

Dooley Wilson (Sam, el pianista) con Bogart (Rick Blaine) 

en un descanso del rodaje. Una copa y un paquete de cigarrillos

compañía inevitable de Bogart.

     Nadie hubiese dado cuatro duros (duro: denominación coloquial que se daba a la moneda de 5 pesetas) por Casablanca. La Warner pensaba hacer una película más, una de las tantas que Hollywood vomitaba al cabo del año. Para empezar estaba basada en una obra de teatro (Everybody Comes to Rick's) que no había logrado ser estrenada en el escenario. Por si fuera poco, el guión estaba escrito por al menos cuatro guionistas que, salvo los hermanos Epstein, trabajaban independientemente unos de otros. Para más inri el guión, que no estaba terminado, se improvisaba, día a día, en el plató y, además, se desconocía el final. Sin embargo, en contra de toda lógica, Michael Curtiz, su director, consiguió rodar una obra maestra que, actualmente, es una leyenda mítica, un icono del mundo del celuloide que sigue acaparando espectadores generación tras generación. Curtiz, un director infravalorado (la crítica le sigue considerando un artesano de películas de encargo) fue el elegido por Hal B. Wallis, el productor de la Warner, para llevar a buen puerto la producción. Los guionistas fueron los gemelos Epstein, en dos etapas -pues abandonaron el proyecto y luego volvieron a retomarlo- Howard Koch y Casey Robinson (este último 
no acreditado).

Ingrid Bergman y Humphrey Bogart. Paul Henreid
completaba el triangulo amoroso.

      La fotografía estuvo a cargo de Arthur Edeson y la música de Max Steiner que, curiosamente, el tema más famoso de la película, El tiempo pasara, no esta compuesto por él. El reparto lo encabezaba Humphrey Bogart junto a Ingrid Bergman y Paul Henreid, escoltados por Claude Rains, Peter Lorre, Conrad Veidt, Sydney Greenstreet y Dooley Wilson. Y un gran número de secundarios (Marcel Dalio, Madeleine LeBeau, S. Z. Sakall...) en su inmensa mayoría exiliados europeos (de los citados tan solo Bogart y Dooley Wilson eran estadounidenses) que habían huido, por diversas causas, del regimen nazi.


     No me extenderé mucho más, pues ya hay un amplio articulo sobre Casablanca en este blog.

Claude Rains y Paul Henreid junto a Bogart en dos
escenas de Casablanca.

   



"¿Sabe cual es la película más popular jamás realizada? Casablanca. No es una película perfecta, no es la película que más dinero ha dado, pero cada vez que se pasa por televisión bate récords de audiencia".
(Billy Wilder).


   

    

   

HUMPHREY BOGART Y LAUREN BACALL



Con Lauren Bacall.

     En septiembre de 1943, Humphrey Bogart, estaba rodando Pasaje para Marsella cuando conoció a Lauren Bacall. Howard Haws la llevó al estudio para presentárle a la que sería su compañera en Tener o no tener.


 
   "No hubo truenos ni relámpagos, solo un simple mucho gusto. Bogart era mucho menos alto de lo que yo había imaginado y vestía sus habituales pantalones, sin forma, camisa de algodón y una bufanda al cuello. No me hablo de nada importante; no nos quedamos mucho rato, pero él parecía un hombre agradable".
(Lauren Bacall).



     A principios de 1944, antes de empezar el rodaje de Tener o no tener, Bogart se cruzó con Lauren Bacall en el estudio y le dijo: Acabo de ver su prueba. Nos divertiremos mucho juntos. Era la primera película de Bacall era una jovencita de 19 años, con largas piernas y una mirada turbadora en sus ojos verdes.

Lauren Bacall.
   
"Bogart me ayudó mucho desde el principio. Hizo todo lo posible para que me sintiera comoda. Estaba a mi lado".
(Lauren Bacall).



 
   "El trabajo entre ambos desató una química inesperada que se consolidaba rápidamente. No se como sucedió, fue casi imperceptible. Llevábamos tres semanas con la película, era el final del día, yo tenía una toma más y estaba sentada frente a la mesa de mi camerino portátil, peinándome, Bogie entró a despedirse. Se situó detrás de mí puso su mano bajo mi barbilla y me besó. Fue un impulso -él era más bien tímido-  y no el calculado asalto de un lobo feroz. Sacó una caja de cerillas usada de su bolsillo y pidió que escribiera mi número de teléfono en la parte de atrás. Lo hice".
(Lauren Bacall).



Así comenzó el idilio entre Humphrey y Betty que culminaría en matrimonio, después de superar varias dificultades, el 21 de mayo de 1945. Puede decirse que fue un matrimonio feliz:


Lauren Bacall con Humphrey y Harvey.
"Eramos felices, famosos y afortunados. Nunca conocí a nadie que me pudiera amenazar el matrimonio".
(Laren Bacall).



Compraron una casa en Kings Road, y más tarde otra en Holmby Hills. Antes de tener hijos tuvieron un perro, Harvey.

"George Hawkins y Louis Bromfield nos regalaron un perro boxer con ocasión de nuestra boda. Le llamamos Harvey, por el famoso conejo".
(Lauren Bacall).



Recordemos que Harvey era el conejo amigo de James Stewart, que solo él podía ver, en El invisible Harvey. Stewart interpreta al bondadoso Elwood P. Dowd, un alcohólico, al que curiosamente nunca se ve tomar una copa, que tiene por compañero inseparable a Harvey, un conejo de dos metros.

James Stewart (Elwood P. Dowd) observa orgulloso el
cuadro que se ha hecho pintar con su amigo Harvey.



Los Bogart hicieron tres películas más juntos, El sueño eterno, poco antes de casarse, La senda tenebrosa y Cayo Largo, esta última dirigida por su amigo John Huston al que hacía muy poco que Bacall había conocido.


Lionel Barrymore, Bacall y Bogart en Cayo Largo,
dirigida por John Huston.
"John Huston era y es otro original. Aparte de un extraordinario talento, personalmente es de un atractivo hipnótico. Muy alto, delgado, de voz suave y hablar cuidadoso, parece moverse con suma facilidad por la vida. Adoraba a Bogie y viceversa y era muy divertido, pero con un humor perverso y socialmente imprevisible".
(Lauren Bacall).



En 1947 comenzaron en Washington las investigaciones del demencial Comité de Actividades Antiamericanas, es decir, se inicio lo que comúnmente se conoce como La caza de brujas. Bacall y Bogart se implicaron en la campaña contra este comité y participaron en la marcha sobre Washington del 27 de octubre de 1947. Bacall se implico mucho más que Bogart como así lo demuestra el articulo que escribió en el Washington Daily News titulado Por qué vine a Washington:



"Cuando el comité empieza a dictaminar qué películas pueden hacerse y cuales serán sus temas, es el momento de levantarse y luchar. La investigación ha empezado por nosotros, pero lamento decir que no creo que acabe aquí..."

  


Lauren Bacall y Bogart, un matrimonio
bien avenido.

Desde entonces Bacall sostuvo una postura política liberal y demócrata que la llevó a participar activamente en la campaña para presidente de Adlai Stevenson con el que mantuvo siempre una gran amistad.
Poco después Bacall se quedo embarazada.



"Debía preparar la escena para cuando Bogie llegara a casa esa noche. Se desmayaría cuando lo oyera. No lo hizo.  No sé qué sucedió, pero después de darle la noticia nos enzarzamos en la pelea más grande de nuestra historia. Yo lloraba; un momento tan querido y esperado por mí se había convertido en un desastre".
(Lauren Bacall).



El 6 de enero de 1949 nació Stephen, el hijo primogénito del matrimonio Bogart.


"Dos días antes de volver a casa con mi bebe cayó en Los Angeles la primera nevada en cincuenta años. Recuerdo que sentada en mi cama y mirando por la ventana pensé que se trataba de un sueño ¡Qué gran regalo, especial para el hijo de padres nacidos en el este!".
(Lauren Bacall).



Cayo Largo de John Huston.

Dos años después se marcharon a Africa a rodar con John Huston La reina de Africa. Era la primera vez que Bacall salía de Estados Unidos. Estuvieron en Londres, París y Roma antes de volar a Stanleyville. Durante el rodaje, Lauren se hizo cargo de la intendencia.


"Como la vida parasitaria no era mi estilo, me hice cargo de las comidas para hacer algo útil. Hasta entonces eran un desastre. Tenía dos ayudantes nativos a quienes no les gustaba mucho recibir órdenes de una mujer; y siendo yo una mujer blanca, peor. El rodaje acabó bien aunque todos, menos Bogart y Huston, inmunes por el alcohol en sus venas, estuvieron más o menos enfermos".
(Lauren Bacall).



La reina de Africa le proporcionó un Oscar a Bogart. Ese mismo año, el 23 de agosto de 1952 nacía su hija Leslie.
Hasta 1956, Bogart rodó una película tras otra, tosía, navegaba en el Santana, Bacall cuidaba a los niños, trabajaba y salía con amigos, especialmente Fran Sinatra que se convirtió en un asisuo de la casa.

Tener y no tener, la pelicula que soldó los destinos de Bogart
y Bacall. Solo la muerte pudo desbaratar la soldadura.

"A finales de verano comenzó a estrecharse nuestra amistad con Sinatra. Le veíamos al principio en casa de amigos comunes; después comenzó a visitarnos y nosotros a visitarle a él. A Bogie siempre le había gustado Frank, admiraba su lucha contra los molinos de viento y Frank le divertía".
(Lauren Bacall).



Sin embargo, a Bogart, la vida comenzó a escaparsele lentamente, imperceptiblemente...


"Siempre había tosido. Desde el primer día de rodaje en Tener y no tener, entre rodando y acción le oía toser. Yo estaba tan acostumbrada a su tos que no me había dado cuenta de ningún cambio. Ultimamente comía menos, pero tampoco ese detalle era desacostumbrado".
(Lauren Bacall).

    

Bogart y Bacall: Los rastros de la
enfermedad son evidentes.


Bogart estaba enfermo. El 29 de febrero de 1956 le operaron de un cáncer en el esófago. Era el principio del fin. El destino de Bogart y el de Harvey parecían estar indisolublemente unidos:


"Harvey se puso enfermo aquel verano; tosía mucho y parecía tener dificultades para moverse con rapidez; no parecía el de siempre y comía menos. El veterinario dijo que tenía el corazón débil".
(Lauren Bacall).



Las visitas de los amigos se ordenaron de forma que Bogart pudiera estar con todos sin sufrir los problemas del agotamiento.


Todo aquel que quisiera ver a Bogie debía llamar antes y preguntar cual sería el momento más oportuno; además no quería mucha gente al mismo tiempo y no importaba lo amigos que fuesen, en su estado actual era un esfuerzo muy grande".
(Lauren Bacall).



Bogart murió el 14 de enero de 1957.


"Harvey subió al dormitorio y fue hasta la cama; primero al lado que había ocupado Bogie, luego al otro y después se metió en el cuarto de vestir de Bogie. Sabía que algo muy malo había sucedido. Se dirigió de nuevo hacía la cama, me miró como si entendiera y allí se quedo".
(Lauren Bacall).

   

   

Tras la muerte de Bogart, la vida de Bacall siguió su curso. Tuvo un romance con Sinatra y se casó en 1961 con Jason Robards, con el que tuvó otro hijo y siguió haciendo películas, aunque no tan memorables como las que compartió cartel con Bogart. Ella siempre será Slim, aquella chica de ojos verdes que un día le dijo a Bogart: Si me necesitas silba.

  

Stephen Bogart el día del funeral de su padre: 

"Me
taparía la cara con las manos y, al no vermela, ellos
(los fotografos) abandonarían su intento.


Bogart en sus últimos años estuvó obligado a usar
peluquin. El lo detestaba.
"Ignoro desde cuándo supo que su marido estaba gravemente enfermo, pero lo cierto es que se comporto con gran valor y total entrega".
(David Niven).



"Lo más es que Bogie se enamoró del personaje que ella interpretaba, así que tuvo que seguir interpretandolo durante el resto de su vida".
(Howard Hawks).



El sueño eterno.
"¿Crees que podríamos hacer una chica tan insolente como Bogart?".
(Howard Hawks).



"Fingiendo un gran sueño se despertó su amor y decidieron dormir juntos durante toda su vida".
(Françoise Truffaut).


La senda tenebrosa.











"Bogart era un sueño. ¡Maldición, qué grande era! Bogart era un maravilloso actor".
(Nicholas Ray).

   

   


          

      

    

    

EL RAT PACK

Humphrey Bogart sin
su odiado peluquín.


"Bogart lideraba el grupo que estaba más en boga de todos, el Holmby Hills Rat Pack. Tal vez la gente de mi edad piense que dicho grupo estaba integrado por Frank Sinatra, Dean Martin, Sammy Davis Jr., entre otros, pero a excepción de Sinatra, esos no fueron los miembros fundadores".
(Stephen Bogart).



     Bogart fue miembro fundador del Rat Pack. En la primavera de 1955, después de una interminable fiesta en Las Vegas con Frank Sinatra, Judy Garland, su marido Sid Luft, Mike Romanoff y su esposa Gloria, David Niven, Angie Dickinson y otros, Lauren Bacall, al ver los resultados de la perniciosa fiesta etilica, cuyos componentes volvían cansados y descompuestos exclamo: "You look like a gooddamn rat pack" (Pareceis una pandilla de malditas ratas), refiriendose a la apariencia del grupo. Esta ocurrencia de Bacall fue el origen del nombre del grupo. Así nació el Rat Pack.

     Fue en el restaurante de Mike Romanoff, en Beverly Hills, donde el grupo se haría oficial. Sinatra sería designado el lider; Garland, primer vicepresidente; Bacall, la madre gallina; Luft, el jefe de la jaula; Bogart, la rata encargada de las relaciones públicas; Swifty Lazar, el secretario de las grabaciones y Nathaniel Benchley, el historiador. El local de Mike Romanoff sería designado como guarida oficial del grupo. Cuando el periodista Earl Wilson preguntó a Bacall cual era el propósito del grupo, ella respondió: "To drink a lof of bourbon and stay up late" (Beber whisky y trasnochar). David Niven, Katharine Hepburn, Spencer Tacy, George Cukor y James Van Hansen también formaban parte del afamado grupo.

     Sammy Davis Jr. y Dean Martin no formaban parte de los fundadores del grupo.


"El rat pack" de los años 60



La nueva versión del Rat Pack.

   El grupo estaba compuesto por Frank Sinatra, Dean Martin, Sammy Davis Jr., Joey Bishop y Peter Lawford, el cuñado de John F. Kennedy. Juliet Prouse, Angie Dickinson y Shirley McLaine fueron usualmente mencionadas como Rat Pack Mascots (mascotas del Rat Pack), un titulo que hizo sentir a estas mujeres como "uno de los muchachos". Shirley McLaine era considerada como miembro de honor y fue la única a la que se consideró como uno de los chicos.
   Esta versión del grupo, posterior a Bogart, nunca fue llamada como Rat Pack por parte de sus miembros. Se autodenominaban Summit o The Clan. El Rat Pack fue el nombre que le daban los periodistas, siendo este el nombre por el que es conocido el grupo.

    

PRODUCCIONES SANTANA



Bogart con su hijo Stephen ante
una maqueta de su barco, el Santana.

     En 1948, Bogar fundó su propia productora, la Santana Productions. Santana era el nombre de su amado velero y fue también el nombre del yate que aparece en Cayo Largo. Pudo hacerlo merced a una clausula de su contrato con la Warner Bros. que le permitía tener su propia compañia productora. Jack Warner montó en cólera. Pensaba que otras estrellas también lo harían (James Stewart y Henry Fonda también tenían productora propia) y ese sería el final de los grandes estudios, que perderían su poder, pues su primacía ya estaba siendo amenazada por la emergente televisión.

     En los inicios de los 50, Bogart realizó las dos últimas películas para la Warner: Una llama en el espacio (1950) de Stuart Heisler y Sin conciencia (1951) de Bretaigne Windust y Raoul Walst.

     Para Santana Bogart protagonizó cinco peliculas que comercializó Columbia Pictures: Llamad a cualquier puerta (1949) de Nicholas Ray, Secuestro (1949) de Stuart Heisler, En un lugar solitario (1950) de Nicholas Ray, Sirocco (1951) de Curtis Bernhardt y La burla del diablo (1954) de John Huston. Aunque dos películas todavía se recuerdan, En un lugar solitario, considerada una obra maestra del cine negro, y La burla del diablo, que goza del estatus de película de culto, todas las producciones de Santana fueron deficitarias y motivó que Bogart vendiera Santana Productions a Columbia Pictures en 1955 por un millón de dólares.

   

   

BOGART Y EL AJEDREZ

     Bogart fue un excelente jugador de ajedrez con un nivel de juego cercano al de un ajedrecista profesional. Antes de que su carrera de actor lograse mantenerle económicamente solía jugar partidas rápidas en los parques de Nueva York y en Coney Island a 10 y 25 centavos la partida.

Samuel Reshevsky

George Koltanowski

Las escenas de ajedrez en Casablanca no estaban en el guión, fueron ideadas por Bogart y con su insistencia logró convencer a Michael Curtiz.
Durante 1955 logró unas tablas en una exhibición de simultaneas que el gran maestro Samuel Reshevsky jugó en Beverly Hills. Reshevsky era un duro competidor en los campeonatos mundiales y ganó siete veces el campeonato de los Estados Unidos. Sin embargo George Koltanowski le venció con los ojos vendados en 41 movimientos. Koltanowski solía jugar simultaneas con los ojos vendados.


BOGART Y EL MAR

Bogart exhibe con satisfacción
un trofeo de pesca.

     Desde pequeño, los barcos que veía en el lago Canandaigua, donde los Bogart pasaban los veranos, ejercían una enorme atracción sobre él. No en vano, sus mejores momentos en la infancia estan unidos al barco de vela que tenía su padre. Durante mucho tiempo, mientras vivió en Nueva York y apenas ganaba dinero, olvidó su afición al mar. Pero cuando se traslado a Hollywood y descubrió la isla Catalina, volvió a renacer en él el deseo de navegar. Aún no era una estrella cuando compró una lancha que bautizó como Sluggy, apodo con el que llamaba cariñosamente a Mayo Methot. La isla Catalina era su refugio favorito y en cuanto podía Mayo y él se escapaban a navegar. En el mar nunca se pelearon.

     Pero Bogart no disfrutó de su afición en plenitud hasta que se compró el Santana, un barco de vela donde se aislaba del tumultuoso e hipócrita Hollywood. Aproximadamente pasaba unos 45 finew de semana al año navegando mientrs Bacall se quedaba en Hollywood asistiendo a reuniones sociales. Para los marineros de Newport Beach, Bogart no era la estrella de cine sino un experto marinero.


     "Me gusta navegar: el aire y el mar son limpios y puros y estan lejos de los chismes y sanguijuelas de Hollywood".
(Humphrey Bogart).

    



En la casa de Humphrey Bogart no faltaban los
motivos marinos.

     El barco fue el único rival serio en sus relaciones con Lauren Bacall, quien muy pronto aprendió a renunciar a luchar contra él. También fue un obstáculo en la vida de Stephen, que no fue admitido a bordo hasta que no consiguió aprender a nadar a la edad de 7 años. Muy poco tiempo teniendo en cuenta que acababa de cumplir ocho años cuando su padre murió.
     En el Santana, junto a sus amigos y tripulación, pasó Bogart las últimas tardes al aire libre que su penosa enfermedad le permitió disfrutar. Y estando enfermo, solía contemplar la maqueta del barco añorando el mar y su libertad.


     "Cuando se deslizaba en solitario, empujado por el viento, o se balanceaba inmóvil echada el ancla, se sentía libre: libre de reprimendas y de las exigencias familiares. Con el tiempo llegó a valorar muchisimo la soledad a bordo de una embarcación en mar abierto".
(Eric Lax).

    

     "Bogie estaba ansioso porque conociera a sus amigos navegantes y formara parte de esa vida tan importante para él".
(Lauren Bacall).


    



BOGART Y SU HIJO

Humphrey Bogart con
su hijo Stephen.


     "Hola, hijo. Eres un pequeño camarada, ¿verdad? Yo soy papa: bienvenido a casa".
(Humphrey Bogart, el primer día de vida de su hijo, citado por Lauren Bacall).


    

     Humphrey Bogart tenía 49 años cuando nació su primer hijo, Stephen y casi 53 cuando nació su hija Leslie, a quien llamó así en recuerdo de su amigo Leslie Howard.


 
   "Betty deseaba realmente tener un hijo, y cuando me lo propuso pensé que había llegado el momento, por una razón que, aunque pueda parecer repugnante, no por ello deja de ser cierta: quería dejarle una parte de mí cuando yo muriese".
(Humphrey Bogart).



     Desgraciadamente murió demasiado pronto. Stephen tenía 8 años y Leslie 4 cuando Bogart abandonó el mundo terrenal y desapareció fisicamente de sus vidas. Además de la traumática muerte de su padre, los niños tuvieron que convivir con su leyenda que les perseguía allá donde fueran. Leslie lo superó mejor. A Stephen le costó más. Hasta que no decidió escribir el libro Bogart, en busca de mi padre, a los 43 años, no consiguió reconciliarse con él. Supongo que ayudaría también el descubrir que su padre económicamente era muy rentable.

    

Stephen  Bogart:


Lauren Bacall y Humphrey Bogart
con su hijo Stephen.

Tras el pánico inicial, Bogey empezó a ha­cerse a la idea, y, aunque parezca increíble, sus amigos le organizaron una fiesta: Frank Sinatra, Paul Douglas y Mike Romanoff, en­tre otros, le regalaron pañales, sonajeros e incluso algunas repitas, y eso que en aquella época era imposible saber de antemano el sexo del bebé...

  

Mike Romanoff era una de las pocas per­sonas capaces de ganar a mi padre al aje­drez, aparte de Art Buchwald, y quien mejor llegó a definirlo en una sola frase: Bogart es un hombre de primera clase con una tenden­cia obsesiva a comportarse como si fuese en realidad uno de segunda.

   

Cuando yo nací, Bogey ya tenía 49 años y estaba casado en cuartas nupcias con una bella actriz veinticinco años más joven que él. Era un hombre de costumbres arraigadas, cuya existencia respondía a la siguiente norma: voy a vivir como yo quiera. Así era entonces y así había sido desde mucho antes de que yo naciera.

Mi padre no solo se burlaba de los demás, sino también de sí mismo. Bromeaba acerca de las plataformas que a veces llevaba en los zapatos para parecer más alto y se mofa­ba del peluquín que debió lucir en los últi­mos años de su vida...

  

Bogart y familia.

Generalmente se le considera la mejor es­trella de cine de todos los tiempos. Las his­torias que hablan de él lo describen casi siempre como una leyenda, un hombre con cierta aureola de misterio, el objeto del culto a Bogart. Existen muchos motivos por los que mi padre es más famoso ahora que cuando falleció hace treinta y siete años. Uno de ellos es simplemente el hecho de ha­ber sido el primer gran actor de su genera­ción que murió de forma prematura...

  

El último refugio, El halcón maltes, Casa-blanca. El tesoro de Sierra Madre y La Reina de África fueron las películas que consagra­ron a mi padre como la estrella de cine más famosa del mundo...

  

Humphrey Bogart enseñando a Stephen
a montar en bicicleta.

He descubierto que si bien mi padre era muy peleón y combativo, no siempre discutía para presumir de ingenio o salir airoso de un altercado. Poseía, como dice todo el mundo, una serie inamovible de principios y prefería armar una bronca antes que permanecer ca­llado cuando lo que acontecía a su alrededor entraba en conflicto con ellos. Esto no me sorprendió demasiado...

  

Estoy convencido de que mi padre habría actuado para las tropas con independencia del partido que estuviese en el poder durante la guerra, aunque él fue un liberal demócrata la mayor parte de su vida y se declaró un fer­viente partidario de Franklin Roosevelt...


Cualquiera que fuese la cualidad mágica que poseía mi padre, el caso es que salió a relucir por primera vez en aquella obra el 7 de enero de 1935. Contaba 35 años. Lo que Bogey tenía era ese algo inexplicable que llamamos cualidad de estrella...

   

Su carrera, al igual que su barco me impidieron estar más tiempo con él y supongo que siempre he estado resentido por ello. Después de todo tenía que ganarse la vida y, lo que es más importante, Bogey no sabía que moriría cuando yo solo tenía ocho años.

  

No se si la mente de un niño de 3 años es lo bastante rebuscada para hacer de una estatuilla de metal el símbolo de su rabia y resentimiento, pero creo recordar que cuando mi padre trajo el Oscar a casa, símbolo visible de todo lo que había logrado en Africa, sentí ganas de lanzarselo a la cara. Debía estar muy enfadado...

  

"Dios mio, los personajes que solían reir

en esta habitación: Frank Sinatra, John

Huston, Katharine Hepburn..." (Stephen).

Yo tenía entonces 8 años, y lo que más me ha obsesionado durante gran parte de mi vida es ei hecho de que no me permitie­ran verle, la sensación de haber sido en cierto modo excluido, de haber sido rechaza­do por papá en sus últimos días. Ese senti­miento ha permanecido en mi memoria para siempre y eilo quizás explique, en parte, por qué hasta ahora me había mostrado reacio a hablar de la vida de mi padre.

  

Algunos críticos opinan que el primer indi­cio de la inmortalidad de Bogey como estre­lla cinematográfica surgió en Francia en 1960, cuando en ¡a famosa película francesa Al final de la escapada, Jean-Paul Belmondo, que se halla de pie frente a un póster de mi padre fumando, dice simplemente: Bogey.

  

Tal vez si no fuera el hijo de Humphrey Bo­gart, sino un tipo cualquiera que escribiera un libro sobre Bogey, me hubiese centrado en Lauren Bacall como fuente de informa­ción. Pero ella es mi madre y ya conozco su opinión sobre el tema.

   

   


BOGART Y LOS OTROS


Raoul Walsh, con él rodó cinco películas: ¡Vaya mujeres!, The Roaring Twenties, La pasión ciega, El último refugio y The Enforcer.

    

     "Bogart aún tenía que conseguir su gran éxito y actuaba en papeles secundarios. Ya empezaba a ser conocido como Bogie el quejoso. ¿Como diablos me metí en el cine?, le gustaba preguntar a todo el mundo que quisiera escucharle.


     A pesar de sus protestas continuas, Bogie resulto ser un actor de primera magnitud, haciendo derramar lágrimas cuando pagaba para que la muchacha coja fuera intervenida quirúrgicamente  y obligando al público a levantarse de las butacas durante el atraco y la larga persecusión antes de que él muriera. Esta actuación hizo una estrella de Bogart. Nunca más volvería a actuar en papeles secundarios".


   

David Niven, uno de sus mejores amigos.



     "La primera vez que se le trataba, Bogart inspiraba cierto temor por su sardónico sentido del humor y aquella mueca que era su sonrisa. Uno tardaba un poco en darse cuenta de que su gesto constituía un perfecto camuflaje bajo el cual ocultaba su manera de ser amable y extremadamente generosa. A pesar de todo, no era hombre de fácil trato, y uno tenía que pasar duras pruebas antes de ser aceptado por Bogie.

     Hombre duro y propenso a discutir cuando se hallaba en tierra, Bogie forzozamente tenía que ser una especie de capitán Bligh, cuando se encontraba a bordo de su embarcación. Pero, ante mi sorpresa, se comportó con gran tranquilidad, sin tensión alguna, y demostrando conocer a fondo el arte de levar una embarcación de vela. Me invadió una falsa sensación de seguridad. No tenía la menor idea de que aquel era el día que Bogie había señalado para mi examen de aceptación en su estima".



    


Billy Wilder, con él rodó Sabrina.



 
   "Humphrey Bogart se enfrentó a mí, desde el principio, con un gran rechazo. Bogart no me podía soportar; tampoco podía soportar su papel y no hacía un secreto de ambas cosas... Por primera vez en su carrera tenía que interpretar a un hombre que llevaba pantalones de rayas, un sombrero rígido y un paraguas... Más tarde me enterer de lo mal que lo estaba pasando Bogart. Y no solo porque siempre tenía miedo ante papeles a los que no estaba acostumbrado y temía hacer el ridículo.
     En justicia, tengo que destacar también de Bogart el hombre tan fántastico y valiente que fue cuando yacía en la cama, ya enfermo de muerte. Lo visite algunas veces y vi como soportaba sus sufrimientos sin quejarse y con una gran dignidad".


   



Rod Steiger, con el que trabajó en su última película, Más dura será la caída.


 
   "Tenía lo que a mí me parece que ahora nos falta, un sentido del honor y la profesionalidad. No había que aburrir a quiénes trabajaban contigo explicándoles tus penas durante horas de trabajo. Podías volver a casa y emborracharte y fastidiar a la gente después de las seis de la tarde, pero de nueve a seis no llevabas tus problemas personales al trabajo.
     Un toro joven y un toro viejo que están en una colina. El joven mira hacía abajo y ve a todas las maravillosas terneras y se vuelve loco: Bajemos corriendo y hagamos el amor con un par de ellas, dice el joven. Y el toro viejo responde: Bajemos andando y ¡lo haremos con todas! Esa es la diferencia entre Bogart y yo. El era el toro viejo. Sabía lo que estaba haciendo. Sin prisas. Lo haremos con todas".


    



Nicholas Ray, director con el que rodó dos películas: Llamad a cualquier puerta y In a Lonely Place.



     "Bogart y yo habíamos tenido experiencias comunes en el pasado, pero había entre nosotros mucho más que eso. Los dos estábamos casados con una mujer mucho más joven, él con Bacall, yo con Gloria (Gloria Grahame), que tenían más o menos la misma edad y estaban por entonces en el mismo periodo de embarazo. Ambas eran actrices, ambas se preocupaban de que las fotografiasen bien. Ambas eran enamoradizas. Cada una tenía su estilo pero Bacall era más elegante y mucho más inteligente... Pero compartíamos otra pasión, quizás más devastadora: las copas. Y si, Laurie era más elegante que Gloria en todos los sentidos, también Bogie lo era mucho más que yo, especialmente cuando se emborrachaba".

    

   




Françoise Truffaut, crítico de Cahiers du Cinéma en 1958.


     "La última imagen de Bogart nos lo presenta delante de su maquina de escribir cuando se pone a redactar su confesión al final de Más dura será la caída. Mucho más que este papel, recordaremos su interpretación del director de cine de La condesa descalza. Mientras está enterrando a Ava Gadner, él esta allí, de pie,bajo la lluvia, con su impermeable. Antes de abandonar el cementerio dice: Mañana hará sol, podremos trabajar. 


     Tenía un rostro fascinante, y en una de sus últimas películas, El motín del Caine, la cosa rozó lo sublime. Bogie aparecía en el papel de un capitán duro de pelar y era asi en realidad porque en los antiguos filmes en technicolor no se maquillaba a los actores. Pudimos ver por primera vez, en su labio superior, la cicatriz que dejó hacía mucho tiempo una astilla que saltó en medio de una refriega en la que él participaba con el culo de una botella".

   




John Huston, su mejor amigo y el director con el que más veces trabajó.



     "Mark Hellinger fue el productor de El último refugio, y Raoul Walsh su director. Le ofrecieron el papel principal a Paul Muni, y me alegré cuando lo rechazó y contrataron a Humphrey Bogart para hacerlo. Antes de esta película Bogie estaba muy abajo en la nómina de la Warner. El último refugio marcó un hito en su carrera.
     A Bogie no le importaba tanto dónde actuaba sino cómo actuaba".


   




Joseph L. Mankiewicz, director de La condesa descalza



 
   "Humphrey era un iconoclasta perdido en una sociedad que solo apreciaba a los idolos, es decir Hollywood".


   



Maruja Torres, periodista.


   
 "Cínico, si. Pendenciero también. A menudo grosero con los desconocidos, e incluso con los conocidos. Y al mismo tiempo sentimental, tierno, capaz de gran generosidad, amigo fiel. Su capacidad para el sufrimiento, tanto como la ferocidad, la adquirió Bogart a lo largo de una carrera en la que recorrió durante demasiado tiempo el lado oscuro".


Katharine Hepburn, con la que rodó La reina de Africa.

 
   "Sabía que era bueno. Siempre se sabía su diálogo a la perfección. Siempre era puntual. Odiaba cualquier cosa que le sonara falso. Odiaba también su peluquín desde que empezó a necesitar uno. Le gustaba trabajar con un gorro o un sombrero, algo, cualquier cosa que le cubriera su cabeza... Era un tipo de una decencia extraordinaria. Justo, cabal, sin complicaciones. Divertido también, con un gran sentido del humor. O provocador si veía algo falso en los demás. Entonces jugaba contigo como un gato con un ratón, sin dejarte escapar".

   

     
"Bogie no se andaba con tonterías. Era un hombre".

    



Terenci Moix, escritor.



     "Es difícil, si no imposible, decir algo nuevo de Humphrey Bogart. Fue un hombre, que como Inés de Castro, reinó después de morir. En los años 60 nació lo que se ha dado en llamar mito, un héroe de absoluta modernidad".

   


Bogart y Rod Steiger en Más dura será la caída.
 
     "Bogey era el actor más profesional con quién he trabajado nunca. Según su contrato, la jornada laboral terminaba a las seis de la tarde, y si a esa hora nos encontrábamos en medio del rodaje de una escena, se marchaba. Decía: Son las seis. Ya lo acabaremos mañana. Y se largaba a tomar una copa".
(Ros Steiger).



Con Audrey Hepburn en
Sabrina de Billy Wilder.


 
   "Humphrey Bogart se sintió excluido a causa de mi amistad con William Holden y Audrey Hepburn".
(Billy Wilder sobre el rodaje de Sabrina).



Con Judy Garland.


 
   "Judy Garland siempre tenía problemas. Era una muchacha enfermiza y mimada. Bogart siempre la trato muy bien, aunque, a veces, llegase a perder la paciencia."
(Adolph Green).

     



Con Ava Gadner en La condesa descalza.




     "El señor Bogart no me hizo la vida más facil. Siempre se estaba metiendo conmigo, llamándome la gitana de Grabtown y quejandose de tener que correr para llegar al plató antes de que lo arrollara mi séquito. Con todo he de admitir que probablemente me forzó a hacer una actuación más brillante de la que hubiera logrado sin él".
(Ava Gadner).



     Recordemos que Frank Sinatra, marido de Ava Gadner por aquella época y Humprey Bogart eran amigos. Ava andaba de amoríos con el torero Luis Miguel Dominguín. Esa debía ser la causa por la que Bogart no era amable con ella. Llegó a decir:

Bogart obtuvo el Oscar por
La reina de Africa.
      
     "Las mujeres de medio mundo se arrojarían a los pies de Frank Sinatra, y resulta que ella corre tras un tipo que usa capa y zapatillas de bailarina".
(Humphrey Bogart).

   

   


     En 1952 Bogart ganó el Oscar al mejor actor por La reina de Africa. No se lo creía hasta el momento de oir su nombre. Estaba convencido de que Marlon Brando sería el ganador.

   


Bogart y Katharine Hepburn.
 
   "En realidad, Rock y Bogie eran amigos. El verdadero nombre de Hudson era Roy y odiaba que le llamaran Rock. Por eso siempre le llamaba Rock.
(Lauren Bacall).

    



Con Michèle Morgan en Pasaje para Marsella.
 
   "Bogart entendía la vida en blanco y negro. Los grises no le gustaban".
(David Niven).





 
   "Cuando le alcanzó la muerte en 1957, su categoría estelar y su solvencia dramática estaban sobradamente reconocidas. Si su máscara fue un factor importantísimo del éxito, no llegó a ahogarle como actor. Y, sin embargo, es la máscara lo que recogieron los forjadores del mito". (Terenci Moix).






FILMOGRAFIA




  • Más dura será la caída (1956)
  • Horas desesperadas (1955)
  • La mano izquierda de Dios (1955)
  • No somos ángeles (1954)
  • La condesa descalza (1954)
  • Sabrina (1954)
  • El motín del Caine (1954)
  • La burla del diablo (1954)
  • Campo de batalla (1953)
  • El cuarto poder (1952)
  • La reina de África (1951)
  • Siroco (1951)
  • Sin conciencia (1951)
  • En un lugar solitario (1950)
  • Una llama en el espacio (1950)
  • Secuestro (1949)
  • Llamad a cualquier puerta (1949)
  • Cayo Largo (1948)
  • El tesoro de Sierra Madre (1948)
  • La senda tenebrosa (1947)
  • Las dos señoras Carroll (1947)
  • Callejón sin salida (1947)
  • El sueño eterno (1946)
  • Retorno al abismo (1945)
  • Tener y no tener (1944)
  • Pasaje para Marsella (1944)
  • Sahara (1943)
  • Acción en el Atlántico Norte (1943)
  • Casablanca (1942)
  • A través del Pacífico (1942)
  • Un gángster sin destino (1942)
  • A través de la noche (1942)
  • El halcón maltés (1941)
  • El circo sangriento (1941)
  • El último refugio (1941)
  • La pasión ciega (1940)
  • El hermano orquídea (1940)
  • It All Came True (1940)
  • Oro, amor y sangre (1940)
  • Hombres marcados (1939)
  • El regreso del Doctor X (1939)
  • Los violentos años veinte (1939)
  • Un crimen en la conciencia (1939)
  • Amarga victoria (1939)
  • El chico de Oklahoma (1939)
  • El rey del hampa (1939)
  • Ángeles con caras sucias (1938)
  • Ambición rota (1938)
  • El sorprendente doctor Clitterhouse (1938)
  • Men Are Such Fools (1938)
  • Crime School (1938)
  • Swing Your Lady (1938)
  • Siempre Eva (1937)
  • Calle sin salida (1937)
  • San Quintín (1937)
  • Kid Calahad (1937)
  • La mujer marcada (1937)
  • The Great O'Malley (1937)
  • La legión negra (1937)
  • Isle of Fury (1936)
  • China Clipper (1936)
  • Two Against The World (1936)
  • Balas o votos (1936)
  • El bosque petrificado (1936)
  • Llamada a un asesino (1934)
  • Tres vidas de mujer (1932)
  • Big City Blues (1932)
  • Juventud moderna (1932)
  • El temerario (1931)
  • ¡Vaya mujeres! (1931)
  • Mala hermana (1931)
  • Cuerpo y alma (1931)
  • Río arriba (1930)
  • El conquistador (1930)
  • Broadway's Like That (cortometraje) (1930)

    


FOTOGALERIA, humphrey bogart

SUS PELICULAS



The Dancing Town (1928)

Broadway's Like That (1930) de Murray Roth.


Broadway's Like That (1930) de Murray Roth.



A Devil with Women (1930) de I. Cummings.

Broadway's Like That (1930) de Murray Roth.


A Devil with Women (El conquistador).


A Devil with Women (1930). Irving Cummings.


Up the River (Rio arriba).


Up the River (1930) de John Ford.


Up the River (1930).


Up the River (1930).













Body and Soul (1931)


Body and Soul (1931)


Body and Soul (1931)


Bad Sister (1931) de Hobart Henley.

Bad Sister (1931) de Hobart Henley.

Bad Sister (1931) de Hobart Henley.

Women of All Nations (Vaya mujeres). de Raoul Walsh 

Women of All Nations (1931).

A Holy Terror (El temerario) de Irving Cummings.

A Holy Terror (1931)

A Holy Terror

Love Afair (1932) de Thornton Freeland.

Love Afair (Juventud moderna).

Love Afair.

Big City Blues (1932) de Mervin LeRoy.

Big City Blues

Big City Blues.

Big City Blues

Three on a Match (1932) de Mervin LeRoy.


Three on a Match 


Three on a Match.


Midnight (1934) de Chester Erskine.


Midnight (1934).


El bosque petrificado (1936).

El bosque petrificado (1936) de Archie Mayo.

Bullets or Ballots (1936) de William Keighley.







Bullets or Ballots


Bullets or Ballots.


Bullets or Ballots


Bullets or Ballots.


Bullets or Ballots.


Two Against the World.

Two Against the World.

Two Against the World (1936) de William McGann.

China Clipper (1936) de Ray Enright.

China Clipper.

China Clipper.

Isle of Fury (1936) de Frank McDonald.

Isle of Fury.

Isle of Fury.

Isle of Fury.